Valora este colegio
Colegios y centros escolares similares:
Estos centros tienen unas características parecidas, por lo que es posible que te puedan interesar:
- Colegio CALASANZ de Alcalá de Henares Colegio CALASANZ de Alcalá de Henares. Opiniones, teléfono e información sobre CENTRO PRIVADO DE...
- Colegio SAGRADO CORAZON DE JESUS de Alcalá de Henares Colegio SAGRADO CORAZON DE JESUS de Alcalá de Henares. Opiniones, teléfono e información sobre...
- Colegio LOPE DE VEGA de Alcalá de Henares Colegio LOPE DE VEGA de Alcalá de Henares. Opiniones, teléfono e información sobre CENTRO...
- Colegio ESCUELAS PIAS de Alcalá de Henares Colegio ESCUELAS PIAS de Alcalá de Henares. Opiniones, teléfono e información sobre CENTRO PRIVADO...
- Colegio SANTA MARIA DE LA PROVIDENCIA de Alcalá de Henares Colegio SANTA MARIA DE LA PROVIDENCIA de Alcalá de Henares. Opiniones, teléfono e información...
- Colegio SAN IGNACIO DE LOYOLA de Alcalá de Henares Colegio SAN IGNACIO DE LOYOLA de Alcalá de Henares. Opiniones, teléfono e información sobre...
- Colegio MINERVA de Alcalá de Henares Colegio MINERVA de Alcalá de Henares. Opiniones, teléfono e información sobre CENTRO PRIVADO DE...
- Colegio SAN JOAQUIN Y SANTA ANA de Alcalá de Henares Colegio SAN JOAQUIN Y SANTA ANA de Alcalá de Henares. Opiniones, teléfono e información...
- Colegio GSD ALCALA de Alcalá de Henares Colegio GSD ALCALA de Alcalá de Henares. Opiniones, teléfono e información sobre CENTRO PRIVADO...
- Colegio COLEGIO ALBORADA de Alcalá de Henares Colegio COLEGIO ALBORADA de Alcalá de Henares. Opiniones, teléfono e información sobre CENTRO PRIVADO...
Fui antiguo alumno durante 2016 y 2017, y mi experiencia fue una completa pesadilla. Aunque haya pasado tiempo, creo que es bueno alertar a los padres que estén pensando en meter a sus hijos en este colegio. Intentaré dar mi opinión de manera objetiva, aunque esté basada en mi experiencia personal.
En cuanto al aspecto académico, fue desastroso. Los alumnos estaban todos los días de risas y mofas entre ellos y con los profesores (es ridículo, pero así era en este centro). Era imposible dar clase, ya que todos los alumnos en su totalidad se pasaban las clases hablando y gritando. El ambiente era caótico, como estar en un mercado abarrotado. Salías del colegio agotado y con dolor de cabeza. Este comportamiento no se limitaba a mi clase, sino que era algo generalizado en todas las clases y cursos.
Por este motivo, en los dos años de bachillerato no terminamos casi ninguna materia. En algunas asignaturas, apenas dábamos la mitad del temario, teniendo que estudiarlo por nuestra cuenta. Un ejemplo de ello fue Historia de España de 2º de bachillerato, dejando el 80% del siglo XX y los temas cortos sin explicar en clase.
Los profesores eran parte del problema, no solo no regañaban o se imponían al alumnado sino que fomentaban el ambiente de juerga en clase. Profesores riendo las gracias a los alumnos gamberros, ese era el nivel.
En cuanto a los alumnos, estos eran gente clasista que siempre te miraban por encima del hombro. El bullying era una realidad diaria a la que todos hacían caso omiso y se negaban a reconocer. Yo llegué en primero de bachillerato junto con 3-4 chavales más e integrarte era imposible. Los que llevaban toda la vida en el colegio usaban a los nuevos estudiantes y a los pobres a los que llevaban haciendo bullying durante la ESO para mofarse de ellos y asi no sentirse excluido del grupo popular, era pintoresco.
Es un colegio hostil donde todos se hacen pasar por super buena gente y super simpática y son todo lo contrario.
Eso si, notas regaladas. Todos los estudiantes salían del bachillerato con un expediente académico brillante. Resulta curioso que, posteriormente, en la prueba de acceso a la universidad (EBAU), muy pocos lograban mantener sus notas y no se la pegaban.
En resumidas cuentas, si sois buena gente y vuestros hijos también, alejadlos los máximo posible del colegio San Gabriel. Si por lo contrario queréis criar a un completo capullo, malcriado, mimado, prepotente y sin modales ni saber estar, este es vuestro colegio.
En mi caso no me convertí en eso, porque mis padres me criaron como dios manda, pero si me afectó a nivel académico y psicológico. Pase de ser un niño de buenas notas a suspender 5 asignaturas por trimestre. Si me preguntan como es que acabe aprobando todo, no fui yo, en el San Gabriel te limpian todas las asignaturas que llevas para recuperación, a mi me aprobaron 5 asignaturas, a otros les aprobaron todas, y les da igual.
Por supuesto no me llevé ningún amigo de esos dos años allí porque desde el primer día se negaron a integrarme en el grupo (eh, y soy un chaval normal y corriente, solo tuve problemas de socializar en ese gueto de prepotentes)
Ah, para colmo el ambiente era super competitivo y se mofaban de ti si eras menos que ellos, ya sea notas, popularidad, carisma o deportes.
Me acuerdo que un día estaba super cabreado en clase y le dije a uno que cómo es que no les importaba estar todo el día de juerga y no aprovechar las clases, con lo importante que eran para entrar en la universidad, a lo que me respondió: «yo me mato a estudiar en casa porque sino mis padres me ponen fino, por eso vengo a clase a descansar y a pasármelo bien», cojonudo oye.
También me acuerdo cuando estaba tan harto de la situación que empecé a hablarlo con los profesores, mostrándoles mi descontento y frustración con la situación. Según ellos el problema era mío, que no me centraba en clase y su solución fue ponerme en primera fila un mes y mandarme a la orientadora a hacer el gilipollas, porque yo no tenía ningún problema de estudio ni concentración, lo que tenia eran unos compañeros malcriados y unos profesores incompetentes.
Por culpa de este colegio perdí varios años de mi vida allí y me tomó dos años posteriores en recuperar mi nivel académico y mi rumbo en la vida, ya que salí más perdido que perdidín de este sitio. Por suerte ya estoy terminando mis estudios universitarios con unas notas buenísimas y planteándome seriamente hacer un doctorado, cosa que no hubiera pasado si hubiera seguido los consejos de mi tutora y profesora de segundo de bachillerato, que me recomendó dejar de estudiar y meterme a una formación profesional ya que era «incapaz».